Visitar Berlín con niños es muy cómodo por sus numerosas alternativas de ocio infantil. Es una de esas ciudades que se puede disfrutar muchísimo en familia, está muy pensada también para los más peques.
Una de las primeras cosas que me me llamó la atención al llegar a vivir a Berlín es la vida de niños, por llamarlo así. Hay niños por todos lados, no sólo donde se supone que siempre deben estar, también en conciertos, festivales y saraos varios “de mayores”.
A los berlineses les encanta ir de picnic a los parques en los dias de buen tiempo, y por supuesto que allí llevan a los pequeños, que por cierto hay muchos. Viendo el panorama en Berlin, no parece que vayan a tener ningún problema de envejecimiento de la población. Así que, hay para ellos multitud de zonas verdes dispersas por toda la ciudad: parques con granjas de animales, zona de juegos totalmente habilitadas, y muchos lugares que se pueden visitar y disfrutar en familia, de los que os voy a hablar a continuación.
Actividades para niños en Berlín: Diversión y aprendizaje
En Alemania, cualquier actividad enfocada a los niños, lleva inherente la filosofía del aprendizaje. Raro es que los entretenimientos sea “simplemente” divertidos, también tienen que enseñar. Todo muy “german”.
Legoland Discovery Center
Quizá el lugar para peques más conocido e internacional y el más habitual para quienes visitan Berlín con niños y dedican tiempo especial a los más pequeños. De la popular marca de juegos de construcción Lego, llega este parque de diversión para los niños, dividido en 15 zonas temáticas.
Consta de una primera parte de exposición, donde podemos contemplar los edificios más emblemáticos de Berlín hechos a base de piezas de Lego. A continuación llega una zona de acción total, donde los peques en grupos pueden, por ejemplo, pilotar un barco pirata. Otra área está reservada para que los nenes dejen volar su imaginación y pasen el tiempo que quieran construyendo por su cuenta.
Para los realmente pequeños, tanto que aún no pueden construir hay una atracción en forma de laberinto de Lego, una pared para trepar y una piscina de bolas.
Dirección: Potsdamer Strasse 4. Potsdamer Platz
Horario: De lunes a Domingos. De 10 am a 7 pm.
Labyrinth Kindermuseum Berlín
Este gran lugar de aprendizaje para niños, potencia la filosofía del aprendizaje mientras se experimenta y el despertar del “gusanillo” del aprendizaje mientras los niños juegan.
Juegos como el “tres en raya” o el “memorama” pero en versión gigante llamarán la atención de los más pequeños. Además contarán con camiones y coches para recorrer algunas pistas, paredes para pintar, algunas torres para escalar, y muchas más cosas en este espacio-gigante- de 1.000 metros, que anteriormente fue una fábrica en el barrio de Wedding.
Se recomienda llevar calcetines gordos o zapatillas ya que os tendréis que quitar los zapatos en la entrada, una costumbre muy normal en cada casa de los países del norte.
Cuenta con su propia cafetería donde los más mayores podéis relajaros, mientras los más pequeños se divierten, pero no hay ningún inconveniente en que os llevéis vuestro propio picnic y lo disfrutéis en las gradas que hay para que podáis seguir los pasos de vuestro peques.
Dirección: Osloerstrasse 12.
Horario: Viernes y sábados de 13 a 18 horas
Domingos y festivos de 11 a 18 horas
Museo Alemán de la Tecnología
Este museo es el propio para viajar en la historia de manos de la ciencia. Es uno de los museos tecnológicos más grandes de Europa: 26.000 m². El lugar que ocupa hoy en día no es elegido al azar, como sucede con muchos lugares en la ciudad, es el mismo punto donde siglos atrás se encontraba una estación de trenes de mercancías, las oficinas ferroviarias con dos almacenes y la fábrica de la “Gesellschaft für Markt-und Kühlhallen”.
A primera vista pueden pensar que a los más pequeños esto de la técnica les puede aburrir. Bien, esperen a ver sus caras cuando vean el avión a tamaño natural que está incrustado en la fachada. Y eso es sólo el principio. Una vez dentro: vagones de locomotoras en los que entrar a investigar, una herrería clásica, molinos de agua y viento a escala, barcos originales de todas las épocas, aviones de guerra que cuelagn del techo, etc…os aseguro que van a alucinar.
Además, muchas veces tienes disponibles experimentos y demostraciones que permiten descubrir los fenómenos físicos a través del juego. Lo malo es eso, que no siempre están disponibles, los horarios son algo “caprichosos”.
Debo decir a modo personal, que este museo me vuelve loca, que me encanta, y que quiero que todo el mundo lo conozca. Siempre que voy me convierto en una nena de nuevo, y por eso lo recomiendo como un plan perfecto para toda la familia. Eso sí, una parte del museo tiene la información aún sólo en alemán.
Dirección: Trebbiner Straße, 9.
Metro: Möckernbrücke, líneas U1 y U7; Gleisdreieck, líneas U1 y U2.
Horario: De martes a viernes: de 9:00 a 17:30 horas.
Sábados y domingos: de 10:00 a 18:00 horas.
Lunes: cerrado.
Kinderbauernhof Domäne Dahlem
Se trata de una granja en mitad de la ciudad, donde los pequeños pueden aprender cómo es la vida en el campo, y estar en contacto con los animales.
Se realizan laboratorios para aprender a ordeñar, a criar el ganado, a conducir tractores y muchísimas más cosas. No tienen muchos animales pero son muy graciosos: cabras, ovejas, ponys, caballos, burros. En el huerto, dependiendo de la temporada en que vayáis, tienen plantada siempre algunas verduras.
La idea aquí es que los peques sepan de donde vienen la comida que consumen, y que sepan la forma que tienen estas verduras y las frutas. Si lleváis vuestro propio picoteo, tenéis unas mesas en merenderos donde poder comer tranquilamente. Cuentan con su propio Biergarten, donde cerveza y salchichas no te van a faltar. Además los sábados tienen mercado.
Dirección: Osloerstrasse 12.
Horario: Viernes y sábados de 13 a 18 horas
Domingos y festivos de 11 a 18 horas
MACHmit! Kindermuseum
Sólo puede suceder en Berlín que una iglesia reformada, termine siendo un museo infantil para niños de entre 4 y 12 años. La atracción más destacada es una gigante estanteria de madera para trepar, pero también hay un gabinete de juego, la imprenta del museo y muchas exposiciones temáticas. Cuenta con cafetería.
Dirección: Senefelderstraße 5
Museo de las Ciencias Naturales
Este es un museo, llamado también Museo Humboldt, se exhiben entre otras cosas, esqueletos de dinosaurios prehistóricos, entre ellos el más grande del mundo, un braquiosaurio de 15 mt. de altura. Por otro lado también se exhiben todo tipo de animales a tamaño natural. Por no decir que el lugar es impresionante.
Dirección: Invalidenstraße 43
Entradas: Reserva sin colas aquí
Fez Berlin
Este lugar de recreo para niños, tiene dos espacios: un al aire libre, de acceso gratuito, y otro interior con todo tipo de juegos, rampas de escalada, trenes, un lago para bañarse, zonas de picnic ya que está al aire libre. Este centro sin fines de lucro, para la familia, más grande de Europa es de acceso totalmente gratuito.
Ritter Sport Bunte Schokowelt
Un mundo de chocolate es posible y está en Berlín. El lema de este lugar es “Quadratisch, Praktisch, Gut”, todo muy alemán, muy “cuadrado”, “práctico” y “bueno”. Un lugar en el que además de comprar riquísimo chocolate de todas las variedades que te puedas imaginar, puedes hacer tu propia tableta personalizada por un módico precio.
En la primera planta cuenta con un museo que explica todo el proceso desde que el cacao es cacao hasta que se convierte en el producto que compramos en las tiendas. En el sótano se imparten talleres y en la última planta cuenta con una cafetería en la que puedes comer, no sólo chocolate, por precios muy razonables.
Dirección: Französische Straße 24
Horario:
Lunes a Miércoles de 10h a 19h
Jueves a Sábado de 10h a 20h
Hasenheide Park
En todos los parques de la ciudad, -que son muchos-, puedes pasar una tarde muy agradable en compañía de los niños. Es una alternativa relajante y barata cuando visitamos Berlín con niños. En todos ellos hay zonas de juego, y ten la tranquilidad de vivir en una de las ciudades más seguras y tranquilas. Aquí los pequeños campan a sus anchas.
Pero de entre todos, yo sugiero mi preferido por supuesto: Hasenheide Park. Además de que es precioso, en una de sus partes cuenta con una pequeña granja a la que puedes acceder libremente para que los peques toquen los animales. Cuenta también con una zona de juegos, con toboganes, cuerdas para trepar, columpios, etc…y que tiene hasta un castillo.
No dudes en viajar con tus hijos y llevar a toda la familia en la maleta, Berlín es uno de esas ciudades que absolutamente nadie se queda sin disfrutar.
Cómo moverse con niños en transporte público
Como en toda gran ciudad, a la hora de desplazarse en Berlín, es muy recomendable utilizar el transporte público. Si viajamos con niños, tenemos la opción de hacernos con el Berlin WelcomeCard, que nos ofrece acceso ilimitado al transporte público en un periodo que va entre dos y seis días (dependiendo del pase que elijamos). Lo especialmente interesante al viajar con niños es que- con cada pase de adulto- pueden viajar gratis hasta tres niños hasta 14 años de edad.