Dentro de la enorme cantidad de lugares con interés histórico que tiene Berlín, uno de los más interesantes es el llamado Bunker de la Historia de Berlín, construido en un antiguo refugio antiaéreo de 1943 y pensado para intentar transmitir parte de la sensación de lo que podría ser estar en un Berlín asediado a nuestro tiempo actual.
Realmente, el Bunker de la Historia de Berlín no es sólo un bunker o una recreación de lo que sería un refugio antiaéreo de la II Guerra Mundial, sino todo un museo de historia de la ciudad en el siglo XX, ya que los objetos y hechos que muestra y presenta van desde los bombardeos de la Guerra, hasta la reunificación y la paz, pasando por la convulsa relación entre los dos bloques hegemónicos de Europa en el siglo XX.
Durante el paseo por el bunker podremos encontrarnos salas conservadas con muchísimo detalle, que intentan mantener la estructura y estética original, mientras que otras han sido convertidas en salas de exhibición donde se narra la historia de Berlín a través de objetos, fotografías y documentos originales.
Cada una de las salas está dedicada a un periodo histórico concreto, con lo que los visitantes podemos comprender las diferentes épocas y momentos de la historia de Berlín y cuáles han sido los hechos que han marcado los diferentes cambios que ha vivido la ciudad y cómo han marcado la vida cotidiana de sus habitantes.
Siempre intentando transmitir la angustia del Berlín asediado y la situación de tensión que vivieron sus habitantes bajo los bombardeos. Destaca cómo se muestra la vida de los berlineses durante el régimen nazi, así como las dificultades de la postguerra y la peculiaridad de la ciudad durante la Guerra Fría, ejerciendo como frontera no sólo entre la Alemania Occidental y la Oriental, sino entre los dos granes bloques enfrentados durante la Guerra Fría.
Visitar el Bunker de la Historia de Berlín merece la pena no solo por su valor educativo, sino también por la experiencia única que ofrece. Es una manera de vivir la historia desde uno de los pocos puntos de Berlín que no intentan interpretarla desde la arquitectura o la perspectiva actual, sino como estuvo en el pasado.
Es un lugar de historia y emoción, aparte de una gran oportunidad para acercarse más a cómo fue la vida de los berlineses durante la segunda mitad del siglo XX.
Está situado en el barrio de Kreuzberg, algo al sur de la Puerta de Brandenburgo, bastante cerca de la Potsdamer Platz y la estación de tren de Anhalter. El metro que queda más cerca es el U-Bahn Mendelssonn-Bartoldy-Park.
Podemos comprar entradas desde aquí. No es un precio especialmente caro para lo que ofrece.
